Quiero desayunarte. Así, sin lavarme los dientes. Con gusto a cigarrillo y al café de anoche. Es que te quiero, te quiero con gusto a ayer. Con sabor a lo que hicimos. Con el hambre que me das en las mañanas, cada vez que nos desayunamos juntos.
Raquel Barbosa Sin comentarios Micropoesía